sábado, 31 de diciembre de 2011

Feliz Año Nuevo para todos.

Barrenderos limpiando las calles después de una noche de desenfreno.
   Aunque no pensaba colgar nada más en este año que agoniza, he creído oportuno desear que el Año Nuevo sea Feliz también para los barrenderos, ya que en alguna  ocasión, los graciosos de turno (¡cómo he odiado siempre a quien para hacerse el gracioso ante sus compañeros se dedica a humillar a los obreros!) la han emprendido con ellos, humillándolos y quitándoles las carretillas para jugar con ellas, tirándoselas después al río. Yo creo que esta buena gente se merece todos nuestros respetos, ya que bastante desgracia tienen con tener que acostarse nada más tomar las uvas, para levantarse muy de mañana a borrar de las calles las huellas de nuestros excesos. ¡Comportémonos bien, pues, con todos, pero sobre todo con ellos! ¡Feliz Año Nuevo a todos!