martes, 26 de junio de 2012

Las flores del mal.

Todos los visitantes y peregrinos que pasan por nuestra ciudad, se llevan un recuerdo de las flores del mal. ¡Se necesita ser tontos!
   Después de que el PSOE najerino registrara el pasado 25 de Mayo una moción en las Oficinas del Ayuntamiento de Nájera, urgiendo a nuestros mandatarios a que se ponga fin definitivamente a la presencia de espuma en el río Najerilla, lamentando el hecho de que nos estemos acostumbrando a verla con tanta frecuencia, cuando tenemos tres pozos de captación que extraen el agua de él para consumo público, sin saber la repercusión que el origen y la composición de dicha espuma pueda tener en la calidad del agua, la señorita alcaldesa declaró en un medio escrito que “todos los años cuando se acerca o llega el verano, debido a las altas temperaturas y el caudal del río disminuye, el alga que hay en el cauce (se refiere a las berlañas) produce esa especie de espuma que es totalmente natural, biológica y no produce ningún daño”.  Que así se lo hizo saber a los concejales del PSOE, y que éstos, tras pedirle perdón, retiraron dicha moción.
   No seré yo quien niegue que por alguna extraña reacción, las berlañas (filtro natural de los ríos) puedan generar alguna sustancia parecida a la espuma. Porque el río es algo vivo y manifiesta su estado de salud de diversas maneras. Pero puedo asegurarle categóricamente, señorita alcaldesa, que el PSOE no retiró la moción tras escuchar su explicación (lo de pedirle perdón no se lo cree nadie), y que la espuma que yo llevo más de cuarenta años denunciando, no es producida por las “flores del mal” que a ustedes les gustaría eliminar cada verano metiendo palas mecánicas en el río.
   Y he de decirle también, que independientemente de los vertidos puntuales que algunos malnacidos hacen en nuestro río, existen puntos concretos que todos conocemos, desde los que se vierte impunemente demasiado a menudo. Pero a estas alturas de la vida, yo ya no tengo ni ganas ni tiempo para enumerárselos uno por uno. Por lo demás, ahí tiene usted todos esos riachuelos de riego de los pueblos vecinos, que antes de ir a dar en la mar, como decía Jorge Manrique, contaminan con vertidos orgánicos y químicos nuestras huertas y nuestro río. Así que deje usted de ser tan osada y tan mendaz, y comience de una santísima vez a ganarse el jornal, velando por la salud de sus vecinos.
Esto sí que es espuma. Y sin embargo no hay berlañas.