domingo, 30 de junio de 2013

¡Mejor imposible!


   Tal y como vaticiné ayer, el día de San Pedro amaneció radiante, y el astro sol calentó de lo lindo para que los najerinos la gozáramos como los indios dando las Vueltas, cantando, bailando y bebiendo refrescantes cervezas. En lo único que me equivoqué, y me alegro mucho de ello, (en realidad no fui yo, sino quien me lo dijo), es en que iban a venir veintidós autobuses de Logroño, llenos de jóvenes a hacer botellón a las riberas de nuestro fiero río Najerilla. A diferencia del día de San Juan, las Vueltas se dieron de maravilla; la peregrinación hacia la Calle Mayor fue rapidísima, y de la Calle Mayor a la Plaza de España, aunque costó llegar (cosa absolutamente normal, por otra parte), no hubo incidencia alguna, salvo el sano jolgorio de un pueblo orgulloso de sus paganas fiestas. Los Músicos fueron respetados con escrupulosidad (alguno de ellos aplaudió y todo a los sanjuaneros), y en la Plaza de España disfrutamos del Viriato de propina, además de las tres Vueltas. A las cinco de la tarde, una vez acabadas éstas, la inmensa mayoría de los que estuvimos dándolas nos fuimos a la zona, donde lo pasamos en grande sin que hubiera ni una sola pelea: Solo se registró un pequeño rifirrafe con una cuadrilla forastera que había elegido este día para celebrar en Nájera una despedida de soltero. Hoy, día de San Pedrito (el más hermoso y emotivo para mí, por razones obvias), procederemos a enterrar en hermandad a la “Venancia”, dando las tres últimas Vueltas. Espero que todo salga bien, y que a todos los najerinos, incluidos los Músicos, nos quede un buen sabor de boca de estas hermosas fiestas. ¡Así sea!