sábado, 27 de septiembre de 2014

¡Es usted una farisea!


   Ya basta de ruegos, consejos y buenas palabras para que esta farisea de alcaldesa que nos ha tocado en suerte sufrir deje de tratar a los temporeros como a perros. La verdadera caridad -para mí es justicia- se demuestra con esta pobre gente que tiene que buscarse la vida como sea para poder llevarles algo de dinero a sus hambrientas familias, que se encuentran a miles de kilómetros de Nájera, y no entregándole un jarrón de flores a la Virgen, que ninguna falta le hace, o un cheque de lo recaudado en las degustaciones de la Feria a Cáritas, previo aviso a la prensa, para que la inmortalice como a una magnánima alcaldesa. Lo que de verdad necesita esta pobre gente es un sitio donde dormir bajo techo, asearse con dignidad, y poder dejar sus míseras, y sin embargo, valiosísimas maletas. Lo demás, afortunadamente hay voluntarios y anónimos najerinos que altruistamente se encargan de darles los alimentos necesarios para la comida, y de hacerles y repartirles la cena, para que les resulte menos duro dormir tirados en el suelo por cualquier esquina, teniendo como único techo las estrellas. Me imagino que habrá visto usted hoy, mientras se paseaba altanera con sus compañeros de partido por la Feria, que el soportal del Paseo, el que se encuentra enfrente de la Estación de Autobuses, está llenísimo de maletas. Aunque quizá no las haya visto, ya que a los de su calaña no les gusta ver estas miserias. Jamás le he deseado mal a nadie. Pero me gustaría que se viese usted así por unos días, en un lugar lleno de locales donde cobijarla para hacerle algo más llevadera su vida, y que se los niegue una alcaldesa que va con jarrones de flores, medallas y trajes de Cofradía, a Procesiones y a Misas.