jueves, 13 de noviembre de 2014

Trágicamente vigente.


    Cuando estamos a punto de terminar la legislatura, me veo en la obligación de volver a colgaros un comentario que hice sobre la senadora Mendiola hace casi dos años. Podría rehacerlo, eliminando lo de la Escuela de Patrimonio, pero os lo voy a colgar tal cual está, con la condición de que vosotros cambiéis lo de la Escuela de Patrimonio por los trágicos sucesos acaecidos en nuestra ciudad estos últimos meses: Cierre de tiendas, desaparición de autónomos, aumento de parados -más de mil ochocientos-, concurso de acreedores de Expomuebles, cierre de Tallas Lica y del Matadero… Una situación muy sombría y preocupante para todos los najerinos que, lejos de remitir, todo indica que va a agravarse, mientras ella y los suyos miran para otro lado.
“¿Qué fue de la senadora Mendiola?
     ¿Puede alguien decirme qué fue de aquella senadora nuestra, que se pasó los cuatro años de la pasada legislatura culpando a Zapatero de todo lo que ocurría en nuestra ciudad, en nuestra región y en nuestro país? ¿Se ha retirado, por ventura, de la política? Es increíble que una señora que en vísperas de las últimas elecciones osó decir “que nunca nadie había hecho tanto daño a nuestro país, como Zapatero y Rubalcaba, estando hoy España amenazada de ruina, con la economía estancada, con un enorme déficit y con los mayores recortes sociales de la historia”, lleve ahora dos años seguidos sin decir “esta boca es mía”. O que haya desaparecido del balcón de su sede la infame pancarta que nos ridiculizó durante años a todos los najerinos, en la que rezaba: “Zapatero tiene la Escuela de Patrimonio cerrada”. ¿Qué pasa, señora senadora, que ahora van mejor las cosas? ¿Se ha abierto, quizá, la Escuela de Patrimonio, sin que yo lo sepa? ¿No tiene usted nada que decir sobre la tragedia de que hayan tenido que cerrar casi todas las industrias de nuestra ciudad y de La Rioja, dejando solo en Nájera a más de mil quinientos obreros en el paro? ¿O sobre las más de doscientas familias najerinas que ahora mismo están pasando hambre? ¿O sobre el escandaloso aumento de los desahucios, la prostitución, las depresiones y los suicidios? ¿O sobre los escandalosos casos de corrupción de su partido? ¿O sobre la marcha de nuestros jóvenes talentos a Alemania, para ganarse el sustento? ¿O del incumplimiento total y absoluto del compromiso que su jefe Rajoy adquirió con los españoles, prometiéndoles no tocar el estado del bienestar, la enseñanza, la educación, las pensiones, los derechos de los trabajadores…? ¿Le da a usted igual que nuestra ciudad esté ahora mismo herida de muerte? ¿Cuántas proposiciones de ley ha presentado usted en el Senado? ¿Cuántas ayudas ha solicitado para erradicar problemas tan graves como el de los desprendimientos de rocas de nuestros montes? ¿Cuántas subvenciones ha pedido a Bruselas para adherirnos a un “Plan Integral de Rehabilitación de Cascos Antiguos”? ¿Cuántos proyectos ha presentado para reactivar nuestra industria y nuestro comercio? ¿Cuántas preguntas, propuestas, interpelaciones, demandas, proyectos ha hecho usted para mejorar nuestro moribundo pueblo? ¿Qué le parece no haber llevado a cabo en estos dos años ni uno solo de los proyectos prometidos en su deslumbrante “Programa Electoral”, a pesar de tener tres liberados en nuestro Ayuntamiento? ¿Qué piensa usted, de que tengamos hundidas y llenas de baches y socavones todas y cada una de nuestras plazas y calles? ¿Qué sensación le produce a usted tener la otrora importantísima Calle Mayor hecha un adefesio, cuando se podía haber arreglado por seis o siete mil euros? ¿Qué opina sobre la privatización del agua…? ¡Díganos algo, señora senadora, aunque solo sea para que los najerinos sepamos que no le ha comido a usted la lengua el gato! ¿O es que con la marcha de Zapatero, se marcharon también sus reivindicaciones?”