sábado, 2 de diciembre de 2017

Peligro inminente.


En la continuación de la acera del Puente de Piedra hasta el acceso a las escalerillas que bajan a la zona verde de la margen izquierda del río Najerilla, construida hace unos meses, existe un peligro inminente entre las dos barandillas: la del Puente de Piedra y la de siempre, no solo para los niños, sino para cualquier transeúnte. Cuando las he fotografiado, he hecho la prueba, y quepo yo perfectamente. El remedio -seguro que habrá otros muchos más- es muy sencillo: colocar unas pletinas entre la barandilla antigua y la barra de hierro del puente.